Portada

Enlazamé

domingo, 3 de octubre de 2010

Growing Love. Capítulo 2

Growing Love. Capítulo 2

Ella despertó horas después. Gimió levemente. Inmediatamente Damon se incorporó. Ella estaba algo mareada. Intentó incorporarse, pero inmediatamente cayó al suelo. Damon la cogió justo a tiempo. Elena le miró. Damon sonrió levemente y la abrazó. Elena se dejó abrazar. Después se aferró a Damon y empezó a llorar. Nunca hubiera pensado que Stefan le pusiera los cuernos, ni tampoco que quisiera matarla. Sollozando siguió llorando sobre la camiseta llena de grasa de Damon. El la dejo llorar. Con una mano la empujaba hacia él mientras que la otra le acariciaba el cabello. Unos minutos más tarda Elena dejó de llorar. Se apartó aun sollozando de Damon y se dio la vuelta. Damon la abrazó por detrás.




- Lo siento -dijo ella- Por mi culpa te peleaste con... -Elena descubrió que no podía pronunciar su nombre- con tu hermano. Además tuviste que estar a mi lado mucho tiempo. Seguro que ni siquiera te alimentaste.

- Tengo una reserva en la bodega -musitó Damon- Además me necesitas

- Puedo cuidarme sola

- No creo

- Estoy perfectamente capacitada...-empezó a decir ella, pero Damon le puso un dedo sobre sus labios

- No estás perfectamente capacitada para enfrentarte tu sola a mi hermano y a la zorra de mi ex -dijo Damon clavando sus ojos en los de Elena- Y no intentó hacer nada

- Lo sé -musitó Elena- Además tengo vervena

- Ya -dijo Damon sonriendo- Por cierto lo siento

- ¿Por? -preguntó Elena extrañada

- Por no matarle y por llenarte ese precioso vestido de grasa

- No pasa nada -dijo Elena mirando su vestido. Estaba lleno de grasa. Inservible- Lo iba a tirar

- Esperame en el sofá -dijo Damon sonriendo- Me voy a duchar. Si me necesitas pega un grito

- Claro

- Por cierto vendré de la ducha así que no asustes

- ¡Damon! -le reprimió ella riendose

- Ahora vuelvo -dijo guiñandole un ojo



Elena soltó una carcajada y fue hacia el sofá. Se acostó sobre él. Puso la cabeza en el cojín de la parte derecha y dejo que su pies sobresalieran por la parte izquierda. Bostezó. Se acomodó sobre el sofá. Cerró sus ojos. Empezó a pensar. Empezó a pensar en Stefan. En los días que habían pasado juntos. En esos momentos. Las lágrimas brotaron de sus ojos de nuevo. No se las secó. Siguió llorando. Después del llanto de unos minutos se durmió. Un instante después sintió como alguien acariciaba sus mejillas. Se despertó sobresaltada. Se tranquilizó cuando vio que era Damon quien le había quitado las lágrimas. Elena se levantó y se fijo en el sofá. Estaba lleno de grasa. Se volvió hacia Damon. No estaba allí. Oyó un crujido a su espalda. Se dio la vuelta de nuevo. El sofá estaba limpio. Abrió levemente la boca y se volvió de nuevo. Allí estaba Damon. Con un polo Armani y unos vaqueros.



- Poderes de vampiro -susurró él- Sorprendentes ¿no?

- Como tú -respondió ella riendo

- Por supuesto pequeña Elena -La miró a los ojos- Si quieres puedo hacer lo mismo contigo

- ¡Damon! -le reprendió ella haciendose la ofendida

- Me deberías conocer ya -dijo él riendo de nuevo



Elena puso los ojos en blanco y cruzó el salón a paso ligero. Entró en el garaje y fue a subirse en su coche. Abrió la puerta del conductor. Allí estaba Damon sentado sonriendo. Elena puso los ojos en blanco de nuevo y fue hasta el asiento del copiloto. Abrió la puerta mientras Damon cerraba la otra. Se sentó sobre un toalla que seguramente Damon había puesto allí. Él arrancó el coche. Mientras Elena miraba por la ventanilla. Aún no podía creer que Stefan le hubiera querido matar. Una lágrima recorrió su mejilla. Se la secó con la palma de la mano. La cara le quedó llena de algo de grasa. Bostezó y miró a Damon. Parecía concentrado en algo. Éste al darse cuenta de que Elena lo miraba giró la cabeza y le sonrió ampliamente.



- Te tengo que decir una cosa -comenzó él- creo que sé quien robó tu ropa

- ¿Katherine? -Damon asintió- Lo suponía

- Yo lo sabía antes de lo de él

- ¿Cómo lo sabías? -musitó Elena. Sabía que no quería conocer la respuesta

- La besé

- ¿Qué la besaste? -Elena miró a Damon algo decepcionada- ¿Por qué?

- Porque creía que eras tú -Damon apartó la mirada de Elena. Ésta al escucharlo se sonrojó levemente- Pensé que eras tú la que me correspondía el beso

- Aún amo a Stefan -murmuró Elena- Siempre fue Stefan

- Ya hemos llegado -dijo Damon- Estaré rondando por aqui por si aparecen



Damon aparcó junto a la casa de Elena. Ambos bajaron del coche. Elena fue junto a Damon y le miró a los ojos. Parecía que lo había herido y lo sentía mucho, pero no encontraba las palabras para decirselo. Besó la mejilla del vampiro y entró en su casa. Dentro estaban solo Jeremy y Anna. Elena les sonrió a ambos y subió las escaleras a paso ligero. Cruzó el pasillo corriendo y entró en su habitación. Buscó en el armario y colocó su pijama en la cama. Después fue hasta el baño y se duchó de nuevo para quitarse la grasa. Terminó rápidamente y salió de la ducha. Se envolvió con una toalla, mientras que con otra se secaba sus cabellos. Cruzó el pasillo. Entró de nuevo en su habitación. Allí dentro estaba Damon.



- Bonito cuerpo. La ventana del baño tenía vistas inmejorables -dijo Damon con una sonrisa

- ¡Damon! -le reprendió ella esta vez indignada de verdad- ¡¿Cómo pudiste?!

- Baja la voz que tu hermano te está intentando hacer tía -Elena abrió al boca sorprendida- Pon la oreja en la puerta de su habitación y lo comprobarás. Por cierto cerré los ojos -Añadió rápidamente guiñandole un ojo

- Eso espero -gruño Elena- Porque como me hayas visto te arranco los ojos

- Tienes carácter -dijo riendo- Por eso no lo hice

- Ahora vete

- ¿Me echas?

- De mi habitación -dijo ella poniendo los ojos en blanco- Me tengo que vestir

- ¡Pero si a mi no me importa! -Elena le miró duramente- Ok, estaré fuera. Si me necesitas pega un grito



Damon salió y Elena suspiró. Se quitó la toalla y se puso el pijama. Después abrió la puerta. Damon la esperaba apoyado en la pared. Al verla sonrió ampliamente. Elena le dio las toallas y le dijo que las metiera en la lavadora. Él la obedeció y un segundo después estaba junto a ella. Elena, antes de cerrar la puerta, oyó ruiditos "extraños" en el pasillo. Suspiró y cerró la puerta. Damon ya había entrado y estaba acostado en su cama. Elena se acostó junto a él. Empezó a bostezar. Apoyó la cabeza en el pecho de Damon, algo que le cogió por sorpresa a él, y empezó a dormir plácidamente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario