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Enlazamé

sábado, 18 de septiembre de 2010

Collegio D'Amore. Capítulo 8

Capítulo 8


Hermanos


Stefan era un chico de dieciocho años. Tenía el pelo de color marrón. También tenía mechas rubias. Sus ojos eran de color verde esmeralda. Era muy alto. Mediría más o menos un metro ochenta y cinco. Era delgado y algo fibrado. Sus ojos eran algo grandes. Sus cejas estaban cercanas a sus ojos. Su nariz era recta. Su boca era grande. Su pelo casi nunca estaba bien peinado. Tenía además una barba de varios días. Él fue el primero en reaccionar. Fue inmediatamente hacia la puerta. Fue a abrirla, pero no pudo. Estaba atrancada desde fuera. Algunos empezaron a reaccionar. Aitor, Blad y Edward fueron rápidamente junto a él y entre los cuatros empujaron la puerta de roble. Mientras Jenny y Kate fueron a buscar a los demás para que ayudaran. Olly, sin embargo, fue hasta su habitación para mirar que pasaba fuera desde la ventana. Pronto llegaron los que faltaban. Jacob se unió a Aitor, Blad, Edward y Stefan para intentar abrir la puerta. Varios minutos después, Olly regresó con malas noticias. Dijo que muchos "hombres de negro" estaban en los terrenos. Que el disparo mató a una persona y que esa persona era el primer hombre. El segundo le había disparado tras salir. Los que lo habían oído, en especial Irene, comprendieron que aquello era importante. Muy importante. "La verdad se descubrirá con el tiempo" había dicho. La verdad ¿pero qué verdad?...



Mientras algunos cavilaban sobre las palabras del hombre muerto, otros se miraban de forma tensa sin hablar. Stefan intentó buscar a alguien entre la multitud. Al fin lo encontró. Miró a su hermano. Su hermano mellizo era muy distinto a él. Él era moreno. Tenía los ojos de color celeste como el mar. Era también alto, pero no tanto como Stefan. Era delgado y estaba más fibrado que Stefan. Sus facciones eran parecidas aunque él estaba bien afeitado y bien peinado. Stefan se acercó a él.



- Damon ¿podemos hablar? -le dijo con un susurro

- Claro -le respondió éste fríamente- Vamos a un lugar más tranquilo.



Ambos salieron del vestíbulo y fueron hacia el comedor ahora vacío. Stefan se sentó en una de las numerosas sillas de madera e invitó a Damon a que se sentara. La expresión de su hermano era fría. Distante. Stefan suspiró y clavó sus ojos verdes en los celestes de Damon. Éste apartó la mirada.



- Lo siento -le dijo Stefan- No debería haberlo hecho

- ¿Por qué me pides disculpas ahora?

- Porque pensaba hacerlo antes o después

- ¿Lo sientes de verdad? -Ahora fue Damon el que clavó sus ojos en los de su hermano- Respondeme

- Claro que lo siento. Eres mi hermano

- Eso deberías haberlo pensado antes de liarte con Emma -Damon se levantó- Por cierto no acepto tus disculpas

- Lo siento de verdad -Damon se dio la vuelta- ¡Escuchamé al menos!

- No -le respondió Damon mientras se daba la vuelta. Stefan se levantó rápidamente y cogió a Damon de su brazo izquierdo- ¡Suéltame!

- Antes acepta mis disculpa

- ¿Te acuerdas de la pregunta que te hice cuando lo descubrí?

- Sí...

- Respondemela y te perdonaré -Damon miró a su hermano. Stefan se dio cuenta de que estaba muy dolido- Te lo juro

- La estaba ayudando -Damon le miró muy confundido- Ella quería darte celos porque creía que no te fijabas en ella

- ¿Por qué no se lo dijiste? -le preguntó Damon- ¿Por qué no le dijiste que la quería?

- Porque fuiste tú el que me prohibió hablar de eso con ella -Stefan le soltó- Si quieres creerme bien y si no me crees lo siento pero esa es la verdad



Stefan se encaminó hacia la puerta cuando Damon le cogió del brazo. Stefan se dio la vuelta. Antes de que se diera cuenta, Damon le abrazó. Mientras le abrazaba Stefan sonrió. Por fin había recuperado a su hermano. Cuando terminaron de abrazarse, ambos fueron al vestíbulo de nuevo. Todos los que estaban allí les miraron. Creían que se habían vuelto a pelear. Sonriendo, Damon fue junto a Edward y Jacob y Stefan fue junto a Blad.



- ¿Qué pasó? -le preguntó Blad a Stefan muy extrañado

- Nada -le dijo sonriendo- Solamente nos amigamos de nuevo

- ¿Y eso?. ¿No se había enfadado porque te habías liado con Emma?

- No te lo puedo explicar Blad. Lo siento pero se lo prometí

- Vale. Por cierto me alegro de que os llevéis bien otra vez. Desde que te peleaste con él parecías un zombie en vez de una persona

- Gracias -le dijo Stefan con algo de ironía- Bueno pasó algo por aquí

- Nada aparte de que intentamos abrir la puerta un millón de veces más

- Estará atrancada

- Eso ya lo sabíamos

- Con una rama de un árbol o una barra de hierro ¿no crees?

- Pienso que será la rama de un árbol. Aquí no había barras de hierro y no traían ninguna

- Seguramente. ¿Lo intentamos de nuevo?

- Claro

- Voy a llamar a los demás



Stefan fue a llamar a Damon, a Edward, a Jacob y a Aitor. Llegaron todos junto a Blad. Entonces todo a la vez empezaron a empujar la gran puerta de roble. Unos minutos después, notaron que la puerta empezaba a ceder. Empezaron a unirse más chicos. Diez minutos después, la puerta estaba entreabierta. Empujaron muy fuerte y las puertas se abrieron más. Empujaron una vez más y la puerta se abrió de par en par. Allí, tras el umbral de la puerta, les esperaba una sorpresa.

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